Sus negocio de reposteria para todo tipo de eventos había empezado muy bien, pero al séptimo mes la pandemia hizo que sus ventas cayeran a la mitad, refiere.
Laura Valiente emprendió hace ocho meses un negocio de preparación de tortas en la ciudad de Trujillo, que en pleno arranque tuvo que cerrar debido a la emergencia sanitaria originada por la pandemia del Covid–19.
La dueña del establecimiento “My lady”, explico que en septiembre pasado abrió su negocio, el cual iba muy bien, aunque en febrero sí registró una contracción en sus ventas. Le preocupa no solo pagar el salario de su empleada, los servicios de luz agua y la renta, sino también un crédito bancario que solicitó para iniciar el negocio.
Hace 2 meses tomó la decisión de cerrar de manera temporal para contribuir a la contención de la pandemia y con la esperanza de volver abrir lo más rápido posible. Dijo que para la última semana de marzo las ventas habían caído 50% debido a la poca afluencia. En estos momentos el futuro de su negocio es incierto.
Tenía la esperanza en abrir en 15 días, pero hasta este momento no sabe cuándo podrá hacerlo.
Comentó que, si bien ya tiene la renta de abril pagada, le preocupan los demás gastos por lo que le urge volver a reactivar el negocio.
Expuso que tal vez en un crédito podría sortear la situación, siempre y cuando se normalice la situación en un mes más, cuando mucho.
Calderón Rodríguez Milagros
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